“’¿Por qué será que el ser humano encuentra solamente la carcajada perfecta cuando sabe que ha perdido la vida”, es la reflexión con que cierra la obra teatral “Azul, Amor, Hermano”, de Gustavo Enríquez, presentada en
estreno este miércoles por la Compañía de Teatro de Calle del Instituto Sinaloense de Cultura, desde la Biblioteca Central Estatal Gilberto Owen.
La pieza, que fue transmitida a través de las redes sociales del ISIC en Facebook y Cultura Sinaloa en YouTube, en el marco del Festival Cultural de Primavera 2021 “Arturo Castañeda Dueñas”, contó con la dirección de Iván Camargo, y las actuaciones de Elda Ruth Aragón, Víctor Quintero y Pedro Castro.
Es una pieza teatral realizada con base en el arte clown y el guiñol, con dedicatoria especial a la titiritera Mayra Amezcua, fallecida el año pasado, y habla de cómo a veces nos encontramos tan preocupados por hallar la felicidad que nos olvidamos de vivir y disfrutar el presente.
“Hermano” es un payaso que se encuentra dolor por no encontrar la carcajada perfecta, y en su travesía él cree que nunca le encontrará, cuando en realidad, siempre estuvo ahí, en la vida misma. “Amor” y “Azul” son los otros dos
personajes, los títeres de guante que parecen hacer mofa del payaso por las dudas existenciales en que navega, pero que al final tratan de hacerlo recapacitar con madurez.
Al final, los dos perfiles de “Amor” y “Azul” forman la calavera que representa a la Muerte, que viene por él y le ofrece la última oportunidad de lograr la carcajada perfecta. La pieza teatral se realiza al ritmo de la “Tarantela Napolitana” de Luigi Albertini, y cierra con el “Nocturno No. 2“, de Chopin.
